miércoles, 24 de marzo de 2010

SE AGOTÓ LA OPCIÓN MILITAR VS EL NARCO





SE AGOTÓ LA OPCIÓN MILITAR VS EL NARCO


En respuesta a la creciente percepción de que la lucha militarizada que emprende México contra el narcotráfico está agotada, autoridades mexicanas y estadounidenses establecieron ayer una nueva estrategia contra el crimen organizado.

El esquema, pactado ayer en la Segunda Reunión del Grupo de Alto Nivel entre funcionarios de ambos países, tiene como eje el fortalecimiento de las instituciones civiles del orden público y reconstruir comunidades afectadas por la pobreza y el crimen.

En ese sentido, luego de la violencia suscitada en los últimos días en México, especialmente en Ciudad Juárez, acordaron ampliar la Iniciativa Mérida para convertirla de un apoyo militar y policiaco, en una estrategia social. Según funcionarios estadounidenses, el proyecto sería implementado primero en Juárez.

El plan de 331 millones de dólares constituyó el núcleo de la visita que hicieron a México funcionarios de alto nivel del gobierno de Barack Obama, encabezados por la secretaria de Estado Hillary Clinton y el titular de Defensa Robert M. Gates.

La estrategia contempla incrementar la cooperación binacional de inteligencia, lo mismo que más ayuda para capacitar a agentes policiacos, jueces, procuradores y defensores de oficio mexicanos.

Pero la característica más notable del nuevo plan es el alejamiento de la asistencia militar. La mayoría de los 1.3 mil millones de dólares gastados en la Iniciativa Mérida se ha empleado para adquirir aviones y tecnología informativa para las fuerzas mexicanas de seguridad, pero en el presupuesto del año próximo no se contemplan compras de equipo militar, dijeron funcionarios.

Luego de la reunión entre funcionarios de México y Estados Unidos, la secretaria de Estado norteamericana Hillary Clinton recordó que en días pasados, tanto mexicanos como norteamericanos, han presenciado con mucho dolor terribles tragedias, homicidios que han sucedido en México “y nuestros corazones explotaron en llanto por los homicidios en Juárez, que cobraron las vidas de tres personas relacionadas con nuestro Consulado”.

Dijo que “fueron un terrible recordatorio, el más reciente, de lo mucho que tenemos que hacer juntos y lo importante que son estas reuniones para sintonizar la labor de ambos países, para combatir la amenaza de este sindicato criminal trasnacional, esta red”.

La triste realidad, destacó, es que estos asesinatos son parte de un ciclo mucho más grande de violencia y crimen que ha impactado a las comunidades en ambos lados de la frontera y algo que ha cobrado un precio sumamente doloroso para las familias aquí en México.

“Los cárteles de los narcóticos están librando una guerra contra la sociedad, una violencia que retrasa a las comunidades el desarrollo y que socava el progreso. Así que sí, aceptamos nuestra responsabilidad compartida”, subrayó Clinton.

La responsabilidad de los Estados Unidos, precisó, se centra en la demanda de drogas y tráfico de armas, las cuales son compradas en Estados Unidos y son utilizadas para facilitar la violencia aquí en México.

Aunado a ello, la Secretaria de Estado abundó sobre el acuerdo con autoridades mexicanas para “dar inicio a iniciativas claves, incluyendo programas pilotos para combatir la violencia fronteriza en Tijuana-San Diego y en Juárez-El Paso”, aunque no precisó los detalles de las mismas.

“Todos estos esfuerzos construyen sobre la base de nuestra asistencia continua que nace de la Iniciativa Mérida, estamos aportando cientos de millones de dólares para capacitar y equipar a las fuerzas del orden público en México y fortalecer las instituciones democráticas en México”, afirmó Clinton.

Además, adelantó, el presidente Barak Obama solicitó al Congreso cinco mil 600 millones de dólares para reducir la demanda de la droga en Estados Unidos.

Destacan ayuda para Juárez

En torno a la estrategia social, específicamente para Ciudad Juárez, la secretaria de Relaciones Exteriores, Patricia Espinosa Cantellano, quien presidió la reunión en conjunto con Clinton, afirmó que ambos gobiernos acordaron “impulsar las acciones tanto en el ámbito de seguridad, como en el socioeconómico”.

Para ello, dijo, se decidió impulsar el desarrollo de una nueva visión de la frontera, mediante un programa de trabajo que tiene que ver con la modernización de la misma, con promover la competitividad, un flujo eficiente de mercancías y de personas y, al mismo tiempo, que nos permita concentrarnos en los temas que tienen que ver con las áreas que afectan la seguridad.

Además, precisó Espinosa, fue signada una Declaración Conjunta sobre cooperación contra la delincuencia organizada trasnacional, la cual consta de cuatro ejes: Desarticulación de las organizaciones delictivas que actúan en los dos países; apoyo mutuo para fortalecer las instituciones de seguridad de ambos países; desarrollo de una frontera segura y competitiva para el siglo XXI; y el fortalecimiento de la cohesión social en comunidades de los dos países.

Al respecto, Hillary Clinton insistió en que ambas naciones “estamos trabajando hacia una estrategia integral, la seguridad es clave, la gente no se puede sentir segura yendo a la escuela, al trabajo, a una fiesta, y para luchar contra los efectos a largo plazo que surten los cárteles de narcotráfico. Sabemos que tenemos que trabajar más en temas de la educación y la salud”.

Por ello, dijo, queremos estar seguros de que cuando hablamos de la seguridad no sea solamente la seguridad en su sentido más obvio de sentirse seguro en su hogar, sino también seguridad económica, seguridad en el sentido de la salud.

Finalmente, y contraria a las declaraciones realizadas por la secretaria de Seguridad Interna de los Estados Unidos, Janet Napolitano, la secretaria de Estado reconoció la labor de las fuerzas armadas en el combate al crimen organizado.

“Honramos el servicio y sacrificio de las mexicanas y mexicanos en las fuerzas armadas y en la policía”, resaltó.

Por parte de los Estados Unidos, estuvieron presentes el secretario de Defensa, Robert M. Gates; la secretaria de Seguridad Interna, Janet Napolitano; el jefe del Estado Mayor Conjunto, Michael G. Mullen; el director de Inteligencia Nacional, Dennis Blair; el asesor adjunto de Seguridad Nacional, John O. Brennan; el subprocurador en Funciones, Gary Grindler; la administradora en funciones de la DEA, Michele Leonhart; director de la Oficina de Control de Activos del Exterior del Tesoro, Adam Szubin; director de la Oficina Nacional para la Política Antidrogas, Gil Kerlikowske, así como el embajador Carlos Pascual y una amplia gama de funcionarios de alto rango.

La próxima reunión del Grupo de Alto Nivel se celebrará en Estados Unidos en 2011.

(Martha Figueroa/con información de The New York Times). CARTÓN DE HERNÁNDEZ.

No hay comentarios:

Publicar un comentario